POESÍA JAPONESA
Me senté en su regazo la muerte, me abrazo fuerte me recosté en ella me hizo mirarla y me besó devoró mis labios
Tú aliento melodía para mi espíritu poema encadenado son tus dedos en mi piel tus ojos me cantan romances
Desolación. En el silencio el hada de los bosques ¿Nos quieres aún Gaia? mi destrucción
Estoy en la cama pensando en todo lo que estamos pasando los comercios arruinados trabajadores parados. Las mascarillas están de moda
Deliciosamente obsceno le dije, con un tono profundo como el azul de sus ojos, mis piernas temblando de pura ansi… por tocarlo.
Suena la música la orquesta toca jazz. Canción de luna de una ciudad rendida, al swing tan lleno de alma.
Ese poema me contó amores tuyos, Y lo rompí. En la ciudad parejas paseando,
La bella dama está desmadejada, entre mil perlas blancas. Suspira entre ellas; su piel inimitable
Hay distancias que se funden en un apasionado beso. Cierras los ojos y sientes que tu piel se funde con la de él.
Quiero ser tu sumisa quiero ser tu chica mala quiero darte mi vida azótame con fuerza deja tu huella en mí.
Es extraño lo que siento al mirart… telas de araña como pequeñas gotas… caen por mi cuerpo pequeños ríos calientes por mis mu… quiero adorarte, amarte., Sin emba…
Diosa Selene iluminas la noche lucero añil. Bellos astros nocturnos encendiendo las sombras.
La noche me devora malditamente, me hace desaparecer nunca pensé que podía doler así hay cosas dentro de mí que necesito confesar.
El concepto más triste es probable… Es una enfermedad nacida de un amo… Puede ser eliminada a través de la… Se puede curar sin efectos secunda… Cuando las flores se quitan de man…
En la consentidora noche habanera maracas y trompetas ardiendo una muchacha me da una invitación a pecar bailando Ch… La alegría recorre la sala