POESÍA JAPONESA
Mujer hermosa y noble oye al juglar contar historias de un rey innoble que a los campesinos maltrata.
Luna del lobo aúlla la manada la noche mágica licántropos y hechizos furia de los infiernos.
, . ¿Qué le hemos hecho al mundo? Mira lo que le hemos hecho. Qué hay de toda la paz que prometi… qué hay de los campos florecientes…
El agua acuna el torrente del río center oigo como habla
La puerta enorme de madera oscura y lienzos góticos se abrió sin darme tiempo a tocar, miré el enorme vestíbulo, allí cabía sin problemas mi apartamento, estaba alucinando por lo que ve...
La sombreada calle, apenas transitada, me llevaba al final del pueblo. Me encantaba ver las flores que brotaban en primavera como por arte de magia. La hierba cubría el campo, salpicada...
Eres la aguja en la que ensarto el hilo, haciendo pespuntes en tu espalda. Bordo con color rojo tus muslos calientes por el sol
Sueña la vida con tener nubes rosas lluvia de corazones. Sabor a sangre tiene en los labios rojos
Siempre estaré te quiero junto a mí aunque la vida se haga noche y la lluvia de fuego me queme. Porque te amo
Sobre el fondo de mi mente Dios me dibuja un camino por donde el miedo, la ansiedad se van yendo, ya no te temo y me voy sin ti.
MI virtud dolor oscuro, mi cuerpo tú has horadado, dicen que estás ya casado, de azahar roto, me muero. Penas de amor he ganado,
En el Sacromonte bailando, está la gitana morena, Mirándola, la luna llena; volantes revoloteando. A ella le dan una azucena,
Bebés que lloran en aquella habitación blanca como la luna. Alba la enfermera los mira y cantando
pupila azul center mirada ojos arcoíris cuanta tristeza
Veo MI reflejo en su iris el amor sale de mis ojos y se mete en los suyos su boca se acerca a la mía besos fundidos