#Cubanos #Matanceros #Mujeres #ParaNiños #SigloXX
Ocho mulitos tiene mi arria y todos suben por la montaña. Se ve salpicado el río
Miniatura marinera, filigrana de madera, ámbar, jade verdemar. Caballito de sal fina, bailarín, aguamarina,
En la casa que recuerdo, en la casa, entre el naranjal y el cielo: plátano indio, plátano congo,
En primavera, nidos y flores. En el verano, lo aguaceros. En el otoño, las hojas secas. Los aguinaldos en el invierno.
El caballo negro iba por un trillo: cada paso suyo bordaba el camino. El caballo ruano
La Sierra Maestra ¡tan alta, tan grande! ¡tan brava, tan bella! De roca para el tirano; para el patriota, de miel.
Do Re Mi Fa Sol, ya sube la araña. sol fa mi re do corriendo trabaja. Se mece,
En el río San Juan vive un pececito que aprende a nadar. Sobre el Yumirí —iris diminuto—
Naranja sobre limón, sobre limones el agua: agua fértil de represa, agua de la nube blanca. Finas espigas de arroz,
El cielo es un espejo y la gaviota suelta su vela blanca desde la costa. Marinera del aire,
En un caracol rosado de la playa de Girón sobre el nácar hay grabado: “¡Cada cubano un soldado; cada soldado un león!”
Ahí viene la gata de María Ramos, que tira la piedra y esconde la mano. Tírale una
Tiene la vaca bermeja un ternerito de nata. Se lo encontró en el corral un jueves por la mañana. Quiso llevarlo a pasear
Entre las lomas el día nace. Límpidas gotas la noche esparce sobre la hierba
Abril es un niño rubio que junta flores y pájaros; tiene los ojos azules y va vestido de blanco. Mayo es un niño aguador