Concha Zardoya

Desierto de alabastro

Desierto de alabastro,
blancas dunas,
anoche fueron sueño.
Era un viaje polar
inacabable...
Grandes bloques flotaban
como naves sin rumbo,
a la deriva, yertos.
Gaviotas, bobos—pájaros
los seguían gritando.
No sé si caminaba
por la nieve blanquísima.
Mas, sola, deslizándome,
llegaba yo a un centro:
era el eje del mundo,
misterio congelado
Vous avez aimé cette lecture ? Offrez-nous un café !.
Votre aide nous permet d'exister.
Préféré par...
Autres oeuvres par Concha Zardoya...



Haut