Haiku 13
04/01/2016
Te dije adiós un día, (ya no recue… Te veía elegante, altivo, vistiend… encantaba caminar de tu mano sinti… privilegio por tenerte. Pensaba, en mi pueril inocencia, q…
El pajarillo, entona su tristeza. ¡Desde la jaula!
Y yo aún aquí, mientras canta la alondra y nace el día.
¡Brotes de amor! en esa rosa blanca, sobre mi pecho.
Fresca y ligera te refugias del sol y del mal viento. Con tu belleza húmeda, esparces la pureza.
Volando el águila sobre la inerte presa, queda solo huir. Sus garras se le acercan... ¡corre, sálvate, vive!
Delgados troncos atrapan a la luna en fiel abrazo. Tierno y leal cobijo a esa luz entrañable.
Habla el silencio; tala mi soledad, y... siento frío!
Los sentía tan cerca, que sus corazones latían junto al mío y sus risas... sus risas
Por favor, ven y rompe este silencio que me ensordece.
Amo a la brisa, quiero abrazarla siempre. Mis brazos sufren en el intento y caen desolados, vacíos...
El rayo abruma y al cesar la tormenta, ¡lloran los sauces!
Regreso como cada día por esa calle tan habitual, siempre a la misma hora, como inevitable rutina a la que nos somete la vida. Encima de mí, un cielo de invierno donde no se oye el cant...
Ese viejo árbol que yace junto al río no puede erguirse. La corriente lo inclina pero a su raíz, ¡no!
Se hace tarde, muy tarde... y el viento sacude los laureles. Entre humos y sombras regresa la n… La casa duerme, y yo, desvelada, descanso mi frente en la barandill…