He visto en mis tristezas al infie… Palabras de amor de luna, Donde se vierte a las almas ternur… Que se seca antes de llegar a ella… Tan ciegas, tan apagadas.
Yo, brujo de las palabras, de los… Venid a mí, amigas y amigos, Frases nunca dichas, metáforas por… Agua cala abra, leche de cabra... Yo, poeta frustrado y fracasado, d…
Malaventurado de mí... Malaventuradas mis manos de las qu… malaventurada mi alma que no tiene… Malaventurados todos, mi corazón y… Hoy, impotente y mudo, invoco al e…
Un poeta sin tus ojos ni tu boca es un pueblo con hambre Un pueblo con hambre es tierra sin pan de versos Un pueblo sin tus ojos,
Existe en lo más profundo de las llamas de la tierra un reino llamado Escorpio, hecho de fuego y de mantos luminosos. Allí habita Escórpora, el señor de las brasas, de cuerpo de rubí, ...
Vete con los ojos cerrados para qu… Márchate con los puños apretados para que no se te escapen mis recu… Contén el llanto, porque estoy en… nuestro último momento que nos une…
Tú eres mi más dulce momento, noche de pájaros y olas en que siento llegar la muerte. Si me sumerjo y te desgarro,
Hay cuervos en el puerto. Esperan con paciencia la llegada de los marineros que traen el cuerpo muerto del pescador. Murió hoy de madrugada, al apagarse las estrellas. Llevaba en su cue...
Durante mucho tiempo fui un erotófago que navegó entre mares de hipocresía. Mi casa estaba hecha de fuego, construida en niveles subterráneos, donde sólo podían entrar, aparte de mí, la...
Escribo para los muertos, para los que ya no tienen memoria y sólo son presente; para los que sólo me escuchan y no pronuncian mi nombre.
Hubo una vez un día que se enamoró de la brisa del mar, quien disfrutaba de volar por entre las olas y las costas de arenas color violeta. El día la había conocido desde que él era apen...
Cuando vayas a París, lleva siempre en tu equipaje cielo rosa en mis canciones, palabras azules en tu boca. Silencio en mis ojos de aluminio,
Nos amábamos en el despertar de lo… en el murmullo de los pájaros en f… en los lirios encendidos por la ta… en el otoño de palomas, en tu lech… Nos amábamos en el verdor de nuest…
Oh, castigo del cielo, desaforado delirio, como rosa que en mí brota, Inquieta, febril e insinuante, grande pasión me fustiga.
Estos son unos versos muertos que… Palabras enterradas en el corazón… Nacieron muertos porque mi alma ya… Están empolvados de ceniza y a pes… crecen en ellos girasoles