Si acongoja un dolor a los humilde… o si miran un valle, un monte, un… dicen tal vez: “Dichosos los poeta… porque todo lo pueden expresar”. ¡Ah!, pero en el misterio en que v…

Llego aquí como ayer, sencillament… y en medio de los campos abandono mi cuerpo sobre la hierba frágil. Ni voces que interrumpan la secret…

Pensando estoy... Mi pensamiento… ya el ritmo, ya el color, ya el ar… de un mar que alumbran fuegos pone… A la borda del buque van saltando, ebrios del mar, los jóvenes marino…

Mi vaso lleno –el vino del Anáhua… mi esfuerzo vano –estéril mi pasió… soy un perdido –soy un marihuano– a beber y a danzar al son de mi ca… Ciñe el tirso oloroso, tañe el joc…

Vela sus rojos granos la granada en purpúrea prisión; mansos y fiel… cruzan tranquilamente los lebreles por la tierra tranquila y sosegada… La estrella está en sí misma embel…

Yo traje la visión de mis campos n… a la orilla del mar, y la sentí borrarse y tuve un calo… de vida y muerte. Yo traje la visión de un agua dila…

Coro: Nosotros somos los delirantes, los delirantes de la pasión: ved nuestras vagas huellas errante… y en nuestras manos febricitantes

Yo no sabía que el azul mañana es vago espectro del brumoso ayer; que agitado por soplos de centuria… el corazón anhela arder, arder. Siento su influjo, y su latencia,…

La vida es agua de un áureo río, y afluye al tiempo su onda de oro, y es el mañana como el navío en que navega nuestro tesoro. Lanzas, oh muerte, tu soplo frío,

Yo tuve ya un dolor, tan íntimo y… de tan cruel dominio y trágica opr… que a tientas, en las ráfagas de s… fui hasta la muerte... Un alba se… Bien sé que aún me aguardan angust…

Yo fuerte, yo exaltado, yo anhelan… opreso en la urna del día, engreído en mi corazón, ebrio de mi fantasía, y la eternidad adelante,

Vengo a expresar mi desazón suprem… y a perpetuarme en la virtud del c… Yo soy Maín, el héroe del poema, que vio, desde los círculos del dí… regir el mundo una embriaguez y un…

Musa solar con nardos irreales el cielo niño del abril decora, y... Éste era el huerto de una rei… y un lirio que la aurora aljofaró. Pero mi corazón balbuce ante la au…

En la estancia cordial, un poco ag… que bruñó con amor experta mano, y a cuya sombra la bondad celeste fluye en el alimento cotidiano, alguien con dulces voces nos recla…

¿Qué ha de hacer quien ignora el d… la razón de su pan y su vino, y la clave de oscuro avatar? Como el nórdico rey prisionero, de la vieja canción del trovero,