#EscritoresMexicanos
Como viste ropaje tan leve, ne da pesadumbres, pues el filtra y enseña vislumbres de la carne de rosa y de nieve. ¡Y que andar! La mocita se mueve
Si en tus jardines, cuando yo muer… cuando yo muera, brota una flor; si en un celaje ves un lucero, ves un lucero que nadie vio; y llega una ave que te murmura,
A tres leguas de un puerto bullent… que a desbordes y grescas anima, y al que a un tiempo la gloria y e… adornan de palmas la frente, hay un agrio breñal, y en la cima
En la rama el expuesto cadáver se… como un horrible fruto colgante ju… rindiendo testimonio de inverosími… y con ritmo de péndola oscilando e… La desnudez impúdica, la lengua qu…
¡Señor, tenme piedad, aunque a ti… sin fe! ¡perdona que te niegue o r… y el ara tienda con bochorno infam… Vuelvo al antiguo altar. ¡No en v… guirnaldas a un león y desparrame
Llego entre dos esbirros, que no d… de que a un monstruo feroz guardan… Gritos desgarradores me saludan y brazos epilépticos me aprietan. Suspenso en el umbral callo y vaci…
Se que la humana fibra a la emoción se libra, pero que menos vibra al goce que al dolor. Y en arte no me ofusco;
Es un monstruo que me turba. Ojo… como el vidrio de una rada con hon… amenaza los bajeles con las unas d… La nariz resulta grácil y asemejas… La guedeja blonda y cruda y sujeta…
Ya fuiste bendecido y coronado, esplendorosamente consagrado en medio de una pompa sin igual; óyeme, pues, escucha los consejos de quien fue sin tu venia a los fe…
¡Ah! ¿Qué mucho que al Sol que su… se plagiara en divino esplendor alma en quieto remanso la mía, por abril, entre ramos en flor? No cayera por brusca pendiente,
Que como el perro que lame la mano de su señor, el miedo ablande el rigor con el llanto que derrame; que la ignorancia reclame
Como tronco en montaña venido al s… Frente grandiosa y limpia, soberbi… Negras y unidas cejas, con la figu… del trazo curvo y fino que marca e… De un pájaro en un croquis que apu…
Allá en el claro, cerca del monte bajo una higuera como un dosel, hubo una choza donde habitaba una familia que ya no es. El padre, muerto; la madre, muerta…
El misterio nocturno era divino. Eudora estaba como nunca bella, y tenía en los ojos la centella, la luz de un gozo conquistado al v… De alto balcón apostrofóme a tino;
La moza lucha con el mancebo su prometido y hermoso efebo, y vence a costa de un traje nuevo. Y huye sin mancha ni deterioro en la pureza y en el decoro,