#EscritoresArgentinos
Andas por esos mundos como yo; no… Que no existes, existes, nos hemos… No nos conoceremos, disfrazados y… Por los anchos caminos echaremos a… No nos conoceremos, distantes uno…
Así, como jugando, te acerqué el c… Hace ya mucho tiempo, en una prima… Pero tú, indiferente, pasaste por… Hace ya mucho tiempo. Sabio de toda cosa, no sabías acas…
Unos besan las sienes, otros besan… otros besan los ojos, otros besan… Pero de aquél a éste la diferencia… No son dioses, ¿qué quieres?, son… Pero, encontrar un día el espíritu…
Este jardín nos cede su delicia, nos cede el árbol de manzanas llen… fuente de dioses a la sed propicia… pan del instinto, para el hambre,… Mas blanco mármol sin igual pudici…
Oh mar, enorme mar, corazón fiero De ritmo desigual, corazón malo, Yo soy más blanda que ese pobre pa… Que se pudre en tus ondas prisione… Oh mar, dame tu cólera tremenda,
Señor, Señor, hace ya tiempo, un… soñé un amor como jamás pudiera soñarlo nadie, algún amor que fuer… la vida toda, toda la poesía. Y pasaba el invierno y no venía,
Tú me dijiste: no lloró mi padre; tú me dijiste: no lloró mi abuelo; no han llorado los hombres de mi r… eran de acero. Así diciendo te brotó una lágrima
Redoble en verde de tambor los sap… y altos los candelabros mortecinos de los cardos me escoltan con el a… que un sol esmerilado carga al hom… El sol me dobla en una larga torre
Yo danzaré en alfombra de verdura, ten pronto el vino en el cristal s… nos beberemos el licor de oro celebrando la noche y su frescura. Yo danzaré como la tierra pura,
Oh, tú que me subyugas. ¿Por qué… ¿Por qué has venido ahora cuando e… Cuando rosas no tengo para hacerte… Una alegre guirnalda salpicada de… Oh tú, de la palabra dulce como el…
Te ando buscando, amor que nunca l… te ando buscando, amor que te mezq… me aguzo por saber si me adivinas, me doblo por saber si te me entreg… Las tempestades mías, andariegas,
Dientes de Flores, Cofia de Rocí… Dientes de flores, cofia de rocío, manos de hierbas, tú, nodriza fina… tenme prestas las sábanas terrosas y el edredón de musgos escardados.
Siete veces hicimos en media hora el mismo camino. Íbamos y volvíamos al lado de la verja de un jardín, como sonámbulos. Respirábamos la humedad nocturna y olorosa que subía de los cant...
Vamos hacia los árboles... el sueñ… Se hará en nosotros por virtud cel… Vamos hacia los árboles; la noche Nos será blanda, la tristeza leve. Vamos hacia los árboles, el alma
Quisiera esta tarde divina de octu… pasear por la orilla lejana del ma… que la arena de oro, y las aguas v… y los cielos puros me vieran pasar… Ser alta, soberbia, perfecta, quis…