#SigloXX #SigloXXI #Uruguayos #1981 #PoemasDeLaOficina
Todo campo es el nuestro por ejemplo está éste verde dispuesto verde los surcos y los surcos
No es ninguna molestia explicarle qué pienso del infinito el infinito es sencillamente
Anoche cuando supe que Ayrton Sen… se había inmolado en el circuito i… me invadió una lástima polvorienta una tristeza residual nunca sentí admiración por la fórm…
Cuando Jesús arrojó del templo a los estupefactos mercaderes los defenestrados juraron vengarse durante casi dos milenios se reuni… en Roma en París en Wall Street
Arena entre mis dedos bajo mis pies de plomo arena voladora arena buena en tu memoria polen
Para matar al hombre de la paz para golpear su frente limpia de p… tuvieron que convertirse en pesadi… para vencer al hombre de la paz tuvieron que congregar todos los o…
En este instante el mundo es apena… un vitral confuso los colores se invaden unos a otro… y las fronteras entre cosa y cosa entre tierra y cielo
Todas las tardes, al regresar de su trabajo en el Banco (sección Valores al Cobro), Esteban Ruiz contemplaba con deleite su nueva adquisición. Para el joven poeta inédito, aquella maqui...
Hay ayeres y mañanas pero no hay hoyes.
El cielo de veras que no es éste d… el cielo de cuando me jubile durará todo el día todo el día caerá como lluvia de sol sobre mi calva.
Uno llega con sus ojos de buey con sus dedos de frente o con sus pies de plomo todo eso y además
Ellos saben si soy o si no soy, ellos abren la puerta y dicen: «Pa… miran y relativamente son felices, endosan el destino como un cheque y eructan, aquíescentes, sin provo…
Qué suerte siempre iguales hermano vos y yo desde aquella alegría
Nadie sin nada nadie huraña invisible evadida silente desprovista nadie sin nada hueca
Y está tu corazón próximo prójimo hermano a borbotones ensimismado dócil triste exangüe con terribles secretos en tu fondo