Rima XXXVI, by Gustavo Adolfo Bécquer | poems, essays, and short stories in Poeticous

Gustavo Adolfo Bécquer

Gustavo Adolfo Bécquer

Rima XXXVI

Si de nuestros agravios en un libro

se escribiese la historia,

y se borrase en nuestras almas cuanto

se borrase en sus hojas,

te quiero tanto aún, dejó en mi pecho

tu amor huellas tan hondas,

que sólo con que tú borrases una

¡las borraba yo todas!

#Andaluces #Españoles #Sevillanos #SigloXIX #RimasYLeyendas

Enjoyed this read? Treat us to a coffee!.
Your help allows us to exist.

Other works by Gustavo Adolfo Bécquer...

Besa el aura que gime blandamente las leves ondas que jugando riza; el sol besa a la nube en occidente y de púrpura y oro la matiza; la llama en derredor del tronco ar…

4

Podrá nublarse el sol eternamente; Podrá secarse en un instante el ma… Podrá romperse el eje de la tierra Como un débil cristal. ¡todo sucederá! Podrá la muerte

2

58

Cuando miro el azul horizonte perderse a lo lejos, al través de una gasa de polvo dorado e inquieto, me parece posible arrancarme

4

Rima LXXV. ¿Será verdad que, cuando toca el sueño?

¿Será verdad que, cuando toca el s… con sus dedos de rosa, nuestros oj… de la cárcel que habita huye el es… en vuelo presuroso? ¿Será verdad que, huésped de las n…

Cendal flotante de leve bruma, rizada cinta de blanca espuma, rumor sonoro de arpa de oro, beso del aura, onda de luz,

2

Sobre la falda tenía el libro abierto; en mi mejilla tocaban sus rizos negros; no veíamos las letras

1

Como la brisa que la sangre orea sobre el oscuro campo de batalla, cargada de perfumes y armonías en el silencio de la noche vaga; símbolo del dolor y la ternura,

1

Miranda – The Tempest, by John William Waterhouse

Tú eras el huracán, y yo la alta torre que desafía su poder. ¡Tenías que estrellarte o que abat… ¡No pudo ser! Tú eras el océano; y yo la enhiest…

6

Si al mecer las azules campanillas de tu balcón crees que suspirando pasa el vient… murmurador, sabe que, oculto entre las verdes…

1

Nuestra pasión fue un trágico sain… en cuya absurda fábula lo cómico y lo grave confundidos risas y llanto arrancan. Pero fue lo peor de aquella histor…

1

No sé lo que he soñado en la noche pasada; triste, muy triste, debió ser el s… pues despierto la angustia me dura… Noté, al incorporarme,

1

Su mano entre mis manos, sus ojos en mis ojos, la amorosa cabeza apoyada en mi hombro. ¡Dios sabe cuántas veces,

Voy contra mi interés al confesarl… pero yo, amada mía, pienso, cual tú, que una oda sólo… de un billete del Banco al dorso e… No faltará algún necio que al oírl…

1

Tu pupila es azul, y cuando ríes su claridad suave me recuerda el trémulo fulgor de la mañana que en el mar se refleja. Tu pupila es azul, y cuando lloras

1

Leyendas: La promesa

Margarita lloraba con el rostro oculto entre las manos; lloraba sin gemir, pero las lágrimas corrían silenciosas a lo largo de sus mejillas, deslizándose por entre sus dedos para caer e...