#Españoles
Cielo, pino, agua, Dios. Cuatro
Mirar, pero no ver, colocar otros ojos, quizá los de aquel niño que viejísimo mira. Unos ojos perdidos
Esa nube fue y se fue. ¡Qué limpio ha dejado el aire la pureza de ese ser que existió para negarse!
Aquí, sí, pulcritud de pulcritudes… perfil al vuelo afin, nivel de ard… estás, oh mariposa que divides cielos de nieve y rosas de laúdes. Oh cuán lírica maga de altitudes
El soneto es tan ágil como un brin… brinco de corazón o catarata despeñada en un tiempo que delata el deseo del curso hacia un ahínco de no ser y de estar. En él afinco…
Esta vejez reposa sobre un aire de luna. mónde huyeron los soles? Apenas si se ve, andas, ¿tropezarás?
Viene del paraíso un pájaro sin cuerpo llora vaho vive cilicio
Cicatriz de los hálitos; censura como trémulo párpado; un rocío del insomnio esculpido, tu cintura de diminutas flores albedrío. Es, tu cintura, tálamo de un río
En silencio como el río, en silencio, largamente como el chopo,
¿Qué importa cuanto no es azul o r… pequeño violeta o rojo suave? ¡Ay, lo que pasará, tal vuelo de a… conmueve la mirada más ansiosa; lo que no volverá!... Tan nimia co…
Solitario campo. Me encuentro conmigo. Soy mi descampado. Solitario cielo. Me encuentro conmigo.
Resbalando por esta sima umbrosa, yendo sin freno el pie tras la mir… la mano tanteando en piedra helada… y presa la mirada en lumbre hermos… por esta sima voy. ¿Qué luz undosa
No sé de dónde venía, ni nada me sostenía. En sólo huir me entendía. ¿De un orto que no era un orto, yo
Escarcha tuya brasa de pronto siento que me ha besado
¿Dónde está la voz del aire? Tú la escuchas. Es silencio. Sus palabras son las nubes, la luz y el viento sus verbos.