POESÍA JAPONESA
El amor no es solo estar con el ot… Solo al decir “adiós” podemos valo… Permíteme tenerte una vez más, te… “Las oportunidades son como los am… soy un alma que se va desvistiendo…
Yo, celebro abrir los ojos y ver el amanecer desde mi balcón celebro cada respiración cada parpadeo. Celebro la vida
Mis manos se encogen con el dolor de los huesos machacados, solo queda polvo blanco. Mis letras quedan dentro de mí,
Estoy en la cama y tú no estás aquí hoy no huele a café me vas a dejar caer. ¿Qué será de mí ahora?
Hay un lugar que me mata, me rompe sin embargo, siempre estoy ahí. Un sitio perverso donde el dolor es el placer
Y la luna me susurró melodías de amor al oído. Sentí la esperanza nacer en lo sueños de esa noche.
Me late fuerte el pulso al contemplarte desnudo mi corazón está disparado solo con tocar tu boca ardo de amor y deseo.
Llora la dama rayas de lluvia blanca; que quitan vidas. Cae en mí sangre roja, de mi rota nariz,
La arena sedosa recoge el tributo de la mar una solitaria concha que esconde todos los océanos toda la música de los marineros
Eres mi afrodisiaco el “si” de mi margarita mi sonrisa vertical el deseo hecho carne. Tu piel suave
Hay veces que la vida se rasga, le pones mil zurcidos, parches que intentan tapar el dolo… Pero entre las costuras se escapa la tristeza,
Caminaba con la mirada vacía, ese silencio mudo, parece eterno, me hundo en la profundidades del i… ¿por qué me dejó, si tanto me quer… Esa ojeada fría como el invierno,
Deseo que bailes tu vida que la hagas música donde tus pasos vayan más allá del horizonte más allá de los besos olvidados
Aunque no lo creas siempre te quis… pero a veces los días son oscuros… preferí alejarme a hundirte en mi… Focos de luz alumbran mi ansiedad miedos en mi piel se desatan
No sé cuando comenzó esta pesadilla, que me atormenta, que me rompe, me asesina. Tú estabas en mi tan dentro que tuve que